Hace tiempo, leímos este capítulo para clase. Sin embargo, no he tenido tiempo para dar mi opinión sobre este hasta hoy. Creo que es un capítulo muy personal, con el que puedes estar de acuerdo o no con el autor. En algunos puntos yo estoy totalmente de acuerdo, pero en otros considero que el autor es bastante drástico.
Algo en lo que estoy de acuerdo con el autor es que los nuevos medios tecnológicos aportan a los niños una nueva cultura, una nueva manera de socializarse y una nueva manera de entender el proceso de enseñanza y aprendizaje. Se considera que la generación digital trabaja de maneras muy diferentes a las generaciones que les precedieron, tanto desde el punto de vista social como psicológico. A mi parecer esto no es ni bueno ni malo, simplemente es una manera de vivir adaptada a la sociedad y a los tiempos. Los tiempos cambian, las cosas evolucionan notablemente. No obstante, todos no pueden seguir esta evolución. Estas nuevas tecnologías no están al alcance de cualquiera y hay niños que solo las conocen por el uso que se hace de estas tecnologías en las escuelas y, según mi parecer, las escuelas aún no dedican el tiempo suficiente para trabajar los contenidos del currículo a través de las nuevas tecnologías, y mucho menos en infantil. Por lo tanto, las desigualdades solo hacen que aumentar.
También se comenta en este capítulo que gran parte de esta tecnología digital va dirigida a los niños, ya que se ha demostrado que en las casas donde hay niños y adolescentes hay un mayor consumo de medios tecnológicos. Es importante tener cuidado y ser crítico con los productos que compramos, ya que los niños se han convertido en un "nicho" de mercado cada vez más importante. Sin embargo, las personas que realizan estos recursos no son expertos en educación. Actualmente, se ofrece un enorme abanico de productos y medios tecnológicos donde elegir. Por ello, creo que es importante ser selectivo y no dejarse engañar por la publicidad o el marketing del producto y escoger el producto pensando en las necesidades del niño, ya que cada niño es un mundo.
Otro tema que se comenta es el multitasking. Yo aún no se si el multitasking es una capacidad o una debilidad. Reconozco que puedo hacer deberes, chatear y escuchar música hacer deberes al mismo tiempo. Pero creo que igual es una problema de concentración o una incapacidad para prestarle atención a una tarea durante mucho rato. Es cierto que hacer varias cosas a la vez parece bueno, ya que acabas todo lo que tenías que hacer en la mitad de tiempo, pero igual los resultados que se obtienen no son tan buenos como si se hubiera dedicado toda la atención solo a esa tarea.
Por último, en el capítulo se habla de "El niño en riesgo". En este aspecto no estoy del todo de acuerdo con el autor. Es cierto que con los nuevos medios tecnológicos los niños de hoy en día tienen acceso a información que antes no se tenía a su edad. También es cierto que los niños y adolescentes navegan por Internet y hablan con personas desconocidas sin poder comprobar la identidad. Sin embargo, si tanto miedo hay creo que hay métodos para impedir que los niños tengan acceso a determinados materiales. Hay diferentes maneras para solucionar estos peligros, pero creo que lo mejor es mantener informados a los niños y adolescentes de los peligros que hay. La clave está en la educación que se les da. A veces la prohibición es un aliciente que activa la curiosidad y el interés de los niños por aquello prohibido y les incita para que encuentren la manera para sobrepasar las barreras. Es cierto que ahora hay más peligros que antes, mismamente ya no se deja jugar solos a los niños en el parque sin la presencia de un adulto, pero no hace falta alarmarse o meter a los niños en una burbuja, sino ayudarles y darles la información para que entiendan dónde está el peligro y cómo evitarlo, ya que los padres no pueden estar siempre cuidando y protegiendo a sus hijos.
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